En paleontología, el carbono 14 se utiliza para datar restos orgánicos fósiles y así ayudar a trazar la evolución de la vida en la Tierra. Debido a la vida media del carbono 14 (aproximadamente 5.730 años), este permite fechar muestras de hasta alrededor de 50.000 años de antigüedad. Esto ha convertido a la datación por radiocarbono en una herramienta fundamental en el estudio de la extinción de especies como, por ejemplo, los mamuts (Martin & Stuart, 1995).
En Chile, la datación por radiocarbono ha sido utilizada en descubrimientos significativos de fauna del Pleistoceno, como el hallazgo de restos de mamíferos extintos en la Patagonia, lo que ha proporcionado una mejor comprensión de la diversidad y los patrones de extinción de la fauna de esta era (Villavicencio et al., 2015).
Villavicencio, N.A. et al. (2015). Combination of humans, climate, and vegetation change triggered Late Quaternary megafauna extinction in the Última Esperanza region, southern Patagonia, Chile. Ecography, 39(2), 125-140. https://doi.org/10.1111/ecog.01606